La experiencia de ajuste en Argentina tomó protagonismo este año en Washington en la Asamblea de Primavera del Fondo Monetario Internacional con varios paneles que hablaron sobre el tema. En una sala colmada ya 15 minutos antes que comenzara la presentación, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, participó este jueves en una charla liderada por Kristalina Georgieva, la directora del FMI, en la que se habló de los desafíos globales, las tarifas y la eliminación de la burocracia.
En un diálogo distendido, el argentino habló de las dificultades para comerciar sandías y otros casos, dijo que su película favorita era Star Wars y al final le regaló a Georgieva un pin con una motosierra que ella enseguida se puso en la solapa de su saco verde.
La charla duró más de una hora y Sturzenegger afirmó: “En estos tiempos turbulentos, solo tenés que apegarte a tu visión, a tus valores y a tus políticas. En nuestro caso es este retorno de la estabilidad económica, la desregulación y la libertad económica”.
El tema del debate fue “Crecimiento y resiliencia en un mundo incierto” y además de la directora gerente y Sturzenegger en el panel estaban Jörg Kukies, el ministro de Finanzas de Alemania; Rachel Reeves, la ministra de Finanzas del Reino Unido y Kristin Forbes, profesora de Economía Global del MIT.
El lugar de la charla –un inmenso atrio en el edificio más moderno del FMI— se colmó y hubo gente de pie en los pasillos y en la escalera para escuchar el debate.
“Estamos en una mejor posición” para negociar dentro de la guerra comercial global por los aranceles, dijo Sturzenegger. “Lo más importante es que arreglemos nuestros propios problemas. Dicen que los problemas de Argentina son 99% autoinfligidos, y luego tal vez el 1% proviene del resto”. “Y los debemos resolver en casa”, agregó.
“Hay dos ideas principales. La primera es que Argentina nunca más va a tener déficit fiscal. El presidente Milei, que había heredado un déficit del 5% del PIB, equilibró el presupuesto en un mes, y lo ha sostenido. Mucha gente pensaba que eso era imposible. Yo mismo, y aun así se hizo y se ha sostenido”, señaló. «Con la motosierra bajamos el gasto en un 5% del PBI y la economía creció un 6%», afirmó.
La segunda idea es tener libertad económica, que es la desregulación. “Una desregulación inteligente” y dijo que las regulaciones son anti-empresa, están en contra del crecimiento y a favor de la corrupción. “La estrategia de desregulación y libertad económica, junto con la estabilidad económica son los principales impulsores de un mejor panorama para la Argentina”, sostuvo y agradeció al FMI por su apoyo en el proceso.
Además, en estos tiempos turbulentos el ministro apostó por más: «Quiero que Argentina vuelva a sorprender con un superávit fiscal aún mayor».
Y Georgieva, picante, replicó: «Si Argentina logra eliminar el déficit fiscal de una vez y para siempre, no volverá a necesitar otro préstamo del FMI».
Al final de la charla Sturzenegger pidió permiso para salirse del protocolo y le dijo a Georgieva: «Para los que trabajamos en el Ministerio de Desregulación y Reforma del Estado nuestro símbolo es este pin que es una motosierra. Llevamos con orgullo este pin de la motosierra que pagamos con nuestro propio dinero y no con dinero del Gobierno».
«Como alguien que ha dado gran respaldo al programa de Argentina quiero darle de regalo este pin de la motosierra», le dijo el ministro y la directora gerente se rió: «¡Prefiero el pin a la real!».
El presidente Milei ya había regalado una motosierra dorada, de tamaño real, al magnate Elon Musk, que encabeza el ente desregulador de Donald Trump.
Más allá de ser el encargado de eliminar la compleja red regulatoria del país, Sturzenegger fue nombrado el mes pasado como miembro del Consejo Asesor sobre Emprendimiento y Crecimiento del FMI. Este cuerpo dará orientación estratégica en temas de innovación, emprendimiento y crecimiento económico sostenible.
«Es un espacio para aprender, pero también para compartir e impulsar las ideas de la libertad que promueve nuestro presidente, Javier Milei», dijo el argentino cuando aceptó la nominación.
A diferencia de otros años, esta Asamblea contó con otros paneles donde participaron funcionarios argentinos. El presidente del Banco Central Santiago Bausili habló sobre la experiencia monetaria en el país y el secretario de Finanzas Pablo Quirno estuvo en otro panel sobre los desafíos globales.
Sturzenegger ya había hablado sobre la experiencia de la desregulación en otra conferencia en el Banco Interamericano de Desarrollo el miércoles, junto con el presidente del organismo, Ilan Goldfajn.